SUBSECRETARIO CONOCIÓ AVANCES DE PROYECTO DE ERNC EN SU VISITA AL MUSEO “CORBETA ESMERALDA”

En el marco de su comisión a Iquique, donde presidió el Seminario “Futuro de la Energía en la Región de Tarapacá”, el Subsecretario de Energía, Sr. Francisco Javier López Díaz, visitó el Museo “Corbeta Esmeralda” la tarde del miércoles 7 de agosto.

En su visita, la alta autoridad de Gobierno, llegó acompañada de la Seremi de la cartera, Sra. Ximena Cancino Cepeda, siendo recibidos por el Director del Museo, Sr. Miguel Riquelme Herrera, quien los guio por un recorrido a los distintos compartimentos de la reproducción del buque del Comandante Prat, indicándoles las áreas del museo consideradas dentro de la intervención del Proyecto “Recuperación, Mejoramiento y Ampliación” (PREMA), cuyas obras se están materializando actualmente en el museo.
Durante el recorrido, el Director realizó una exposición apoyado por planos e imágenes representativas, en las que especificó la ubicación donde está contemplada la instalación de paneles fotovoltaicos.

Tras la visita realizada en julio de 2018 por el Subsecretario de Energía en ese entonces, Sr. Ricardo Irarrázabal Sánchez, el museo ha efectuado importantes avances para la materialización de un proyecto en materia de Energías Renovables No Convencionales (ERNC).

En esa oportunidad, se firmó un convenio de colaboración de asistencia técnica para desarrollar el proyecto fotovoltaico y, en marzo pasado, la Seremi hizo entrega de un estudio de factibilidad para su ejecución, el cual se espera llevar adelante tras la ejecución del PREMA, a partir de 2020.

Al término de la actividad, el Subsecretario dejó sus impresiones en el Libro de Visitas y recibió, de parte del Director, un ejemplar del libro “La Corbeta Esmeralda de Prat”, del autor Sr. Carlos Tromben Corbalán.

Museo “Corbeta Esmeralda” es la representación a escala real de la gloriosa unidad de la Armada de Chile que se coronó de gloria en el Combate Naval de Iquique el 21 de mayo de 1879, y corresponde a una obra patrimonial desarrollada gracias a un proyecto financiado por la Compañía Minera Doña Inés de Collahuasi, administrado y ejecutado por la Corporación Patrimonio Marítimo de Chile.